Manuel durante esta semana recordaba lo que le había contado un amigo, y es que este se separaba de su mujer después de varios años de casados.
El ya sabia por experiencia que no en todos los casos, pero si en algunos existe una caducidad y esta solo depende de dos para alargarla.
Sabía que el amor, tenía un tiempo
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Que el flujo del querer, no era eterno
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Que a veces lo que das, no lo recibes
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Al igual que una nube, estropea el tiempo
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Lo que no ha funcionado, lo ha estropeado
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Hicieron por seguir, y no pudieron
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Y ella le decía ¿ que es lo que ocurre?
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Y él le respondia ¡ que no sabia!
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Y se apago el amor, que ellos sentían.
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Manuel en este caso no lo tuvo muy dificil de decidir, pues ya era amigo de el mucho antes que de ella, y fué al lado de quien se tuvo que quedar. Aunque solo fuera para escucharle, pues a veces los consejos en estos casos....solo hacen daño.
Precioso poema, pero triste porque una ruptura siempre es dolorosa.
ResponderEliminarAunque la vida es así y no hay más.
Saluditos
Las rupturas nunca son fáciles pero quiero pensar que siempre son porque después te espera algo mejor...
ResponderEliminarMe ha dado pena leerte, pero las rupturas a veces son necesarias para seguir creciendo y desarrollándose como persona.
ResponderEliminarRecibe un cordial saludo desde Berlín.
Pienso que algo se debe perder para siempre en una ruptura. Tengo una amiga que hace poco se ha separado...No sé, si ya lo ha asumido...Un abrazo: Joan Josep
ResponderEliminarOpino como todos, las rupturas nunca son fáciles, de alguna manera son el fracaso de un proyecto de vida, que siempre se hace pensando que durará para siempre
ResponderEliminarUn abrazo y felicidades, aunque sea con bastante retraso